lunes, 20 de marzo de 2017

Oscars light




La última ceremonia de los Oscar la 89, seguro que pasará a la historia, como todas, pero esta de una manera especial, debido a la equivocación o no, cuando Warren Beatty y Faye Dunaway proclamaron que el Oscar a la mejor película era para LA LA LAND (La ciudad de las Estrellas). Cuando todo el elenco que representaba dicha película daban las gracias etc, con el oscar en la mano, se rectificó de una forma digna y valiente por parte de uno de los productores de LA LA LAND,  que realmente la ganadora era MOONLIGHT.
Errores todos cometemos incluso los americanos que presumen de perfecionistas y calculadores al milímetro. Que una gala en directo es imposible que no pase algo fuera del guión establecido, que el factor humano no es infalible, etc.
Pero me gustaría ir más allá en la siguiente y particular reflexión: el inconsciente colectivo es muy poderoso y determinante en todos los aspectos y es algo que esta más que comprobado. El pensamiento y la emoción puede y de hecho es así ¡mueve montañas! por lo que mucho más hacer que una película que mucha, mucha gente sentía, quería y pensaba que iba a ganar, que debería de ganar, fue algo mucho más poderoso que una tarjeta donde se elegía una película, que el inconsciente de una gran mayoría ya había elegido. Esa energía hizo que pasará lo que paso.
Nadie entendió porque, como no se reacciono a tiempo, nadie alerto del error, hasta que fue consumado. Obviamente siempre se buscan responsables, pero la realidad es otra muy distinta a mi entender. Tod@s los que deseábamos que LA LA LAND ganase el Oscar a la Mejor Película, conseguimos que aunque fuera por unos pocos minutos que así fuese.
Si ese poder colectivo se utilizará en otras cosas, para mejorar y cambiar tanto individual como socialmente, cuan diferente sería todo. Pero no creemos en ese potencial y cada cual con su ego va por su lado y así es imposible cambiar algo de fondo, por lo que nos seguirán metiendo las tarjetas que unos pocos han elegido y decidido en base a...
Otra cosa que me ha despertado la curiosidad y la reflexión es que el año pasado la película ganadora fue SPOTLIGHT y la de este año MOONLIGHT, ¡las dos acaban su titulo en LIGHT!
Como no creo en las casualidades y si en las causalidades, esta claro que esta coincidencia es por algo o para algo. Como light, normalmente se le denomina a un producto bajo o nulo en azúcares, quizás sea un mensaje que la ingesta del azúcar y todos su innumerables derivados, debemos de apartarnos de ellos y reducir drásticamente ese producto y su consumo, que tan dañino resulta para nuestra salud física, mental y emocional, si es así, ha merecido la pena que MOONLIGHT se haya llevado al final el Oscar.