Festivales, Certámenes y Premios.

 Saludos en esta nueva entrada. Ahora que acaba de empezar un nuevo año y por lo tanto la de los diferentes festivales, certámenes y demás premios, quiero expresar mi sentir al respecto de todo ello.

En alguna otra entrada de este blog, algo he comentado sobre lo que opino de los diversos festivales, tanto nacionales como internacionales.

Se puede resumir en una sola frase, que es la que se encuentra en la imagen superior: HOGUERAS DE VANIDADES y añadiría de ORGULLOS, SOBERBIAS, ENVIDIAS Y LUJURIAS.

Glamour, premios, distinciones, alfombras rojas, jurados de dudosa imparcialidad y de gustos muy controvertidos e impregnado de intereses poco loables. 

Parece ser que el trabajo de un actor o director es más importante, que la de un investigador, un escritor, un buen empresario, un docente, donde su trabajo, esfuerzo y aportación a la sociedad es en muchos casos superior a toda esta troupe donde incluso su trabajo y aportación más que sumar, resta.

Se les dedica montones de portadas de periódicos, revistas, retransmisiones por radio y televisión, entrevistas de todo tipo, etc.

No entiendo el por qué y el para qué de todo ese montaje, aunque lo intuyo y lo voy a expresar:

-Una buena nube de humo, para cubrir lo verdaderamente importante.

-Para distraer, hipnotizar y hacer creer que la vida es una de lentejuelas y smokings.

-Para embolsarse una buena cantidad de dinero público, tanto los organizadores, como los invitados, donde son tratados como dioses y diosas del olimpo.

-La tajada y publicidad de grandes marcas, que de forma muy descarada, nos meten por los ojos.

-El crear mitos, divos y divas, de barro, a los que siguen millones de personas, la mayoría jóvenes.

-Reforzar los cánones de belleza y de estereotipos, tanto femeninos como masculinos.

-Hacer la pelota a los políticos de turno, para que sigan subencionado proyectos basura.

-Aumentar la competitividad desleal y crear lazos y compromisos, en muchos casos poco honorables.

-En síntesis, engordar, alimentar y reforzar esas grandes y falsas hogueras de las vanidades.

Gracias.